
Gigi ha tenido muy mala suerte. Primero la mandaron a vivir sola a una azotea. Durante una de esas tormentas que la asustaban tanto, llegó a saltar en su afán por escapar, fracturando dos patas. Y la llevaron a un veterinario que le hizo dos cirugías que le hicieron más daño aún. Gigi merece que le cambie la suerte… somos sus únicos amigos. Y necesita tu ayuda hoy!
Por favor, dona, ayúdanos a salvar a Gigi!
Yo dono a vosotros mensualmente, y solo espero que sigáis luchando por estos animalitos. Gigi y los demás merecen la mejor atención. Espero que mostréis más los vídeos donde se ven los animales recuperados y más felices, porque a mi correro llegan solo los videos tristes. .
Gracias por vuestro trabajo.
Marcela de Wit